Juan Soto volvió a encender el espectáculo en las Grandes Ligas. Con un imponente cuadrangular solitario en la quinta entrada, el dominicano firmó su jonrón número 28 de la temporada, otorgando a los New York Mets una ventaja momentánea de 4-3 sobre los Milwaukee Brewers en un duelo cargado de tensión y emociones
💥 411 pies de poder puro, una salida de 105.5 millas por hora y un ángulo perfecto de 26 grados: la pelota viajó hacia el jardín derecho-central, arrancando gritos y aplausos tanto de fanáticos visitantes como de locales sorprendidos.
🔍 Un golpe que cambia partidos
El batazo no solo puso a los Mets arriba en el marcador, sino que reafirmó la capacidad de Soto para alterar el rumbo de un juego con un solo swing. Reconocido por su combinación de poder, paciencia y selección de pitcheos, Soto sigue siendo el motor ofensivo de un equipo que sueña con llegar a la postemporada en esta temporada 2025.
Este cuadrangular es otra prueba de que ningún lanzamiento está seguro cuando Soto está en la caja de bateo. Su constancia y habilidad para ejecutar en momentos de presión lo convierten en una pesadilla para cualquier lanzador rival.
⚡ Liderazgo que inspira
Más allá de las estadísticas, Soto aporta liderazgo y confianza dentro del dugout. Su presencia inspira a sus compañeros a dar lo mejor en cada turno, y su compromiso con la victoria se refleja tanto en el plato como en el campo.
En un partido tan cerrado como el de esta noche, contar con un jugador que combina talento, experiencia y carácter es una ventaja incalculable.
🏆 La recta final: todos por el mismo objetivo
Los Mets saben que la lucha por la postemporada será intensa hasta el último juego. La ofensiva, con figuras como Soto y Pete Alonso, tiene el potencial para inclinar la balanza, pero la clave estará en mantener la cohesión y la disciplina en todas las facetas del juego.
Con Juan Soto en ritmo y el equipo enfocado, la esperanza de un cierre de temporada memorable sigue más viva que nunca.